Durante el descanso de una jornada de siega, un trabajador portugués estaba colgándose de las ramas de un árbol para divertir a la gente, cuando en un momento desafortunado se soltó de las ramas dando con las costillas en el suelo. Mi abuelo le preguntó si se había hecho daño, a lo que el portugués respondió: ¡¡¡Me cago en La Luna!!!.

sábado, 5 de mayo de 2007

LA SENDA ES PELIGROSA

Estos días me ha tocado conducir casi más que cuando estaba en la autoescuela y después de que esta semana tuviese un día de furia al volante, que dejaría a Michael Douglas como una monja clarisa, me paré a pensar, y a parte de lo inútil que es tener coche, me di cuenta de lo diferente que es el mundo fuera de la autoescuela. Así que creé esta lista comparándola con las vida real. A ver si los que tenéis carné estáis de acuerdo y los que no, ya estáis avisados.

Este no sabía nada.

APARCAMIENTO
En la autoescuela: Hay que pegar bastante el coche a la acera y no se puede subir a ella ni golpear a los demás vehículos. No está permitido aparcar en doble fila.
En la vida real: Rara vez encontraréis uno, pero de hacerlo, el coche puede quedar lejos de la acera, incluso si los demás tienen que guardar los retrovisores para poder pasar. Un truco es golpear al otro coche, eso nos avisa de que ese es el límite y que debemos parar. Esta última maniobra hay que hacerla despacio para no arrugar NUESTRO coche. Se puede aparcar en doble fila siempre que el claxon del coche al que estorbáis se oiga desde el bar. El claxon se inventó exclusivamente para eso.


ROTONDAS*
En la autoescuela: Hay que ceder el paso a los que circulan dentro de ella.
En la vida real: Hay que ceder el paso a ese que viene tan lanzado a lo lejos.


PASO DE PEATONES
En la autoescuela: A no ser que tengan semáforo hay que dejar pasar siempre a los peatones y en ellos no se puede estacionar.
En la vida real: Es un simple ornamento de la calzada. Muy útil para
estacionar ya que suelen estar libres.

AL PARAR EN UN SEMÁFORO
En la autoescuela: No es necesario parar justo en la línea, sino donde veamos con comodidad el semáforo.
En la vida real: Hay que parar justo al borde del paso de peatones, casi entrando en él, que tengamos que retorcer el cuello para ver el semáforo. Ese metro que ganamos es muy importante para llegar 5 segundos antes a casa de la abuela.

SEMÁFORO EN ROJO
En la autoescuela: Parar.
En la vida real: Si es de esos semáforos que detectan la velocidad y cambian a ámbar cuando reduces, el semáforo no existe.

SEMÁFORO EN ÁMBAR
En la autoescuela: Parar en condiciones de seguridad ya que se va a poner rojo.
En la vida real: En este caso tampoco existe el semáforo, ver el semáforo en ámbar incluso da derecho a saltárselo en rojo.

TRIÁNGULOS DE EMERGENCIA
En la autoescuela: Hay que colocarlos a una distancia del coche de entre 50 y 100 metros.
En la vida real: Si se quieren colocar, lo mejor es a un par de metros del coche, que andar cansa. Da igual que a esa distancia el coche ya se vea sin necesidad de triángulos, lo importante es tener contenta a la guardia civil.

LINEA AMARILLA EN EL BORDE DE LA CARRETERA
En la autoescuela: Prohibido parar o estacionar.
En la vida real: Para estacionar tendréis que subiros a la acera.

Habrá muchos más ejemplos, pero hijos, mi imaginación tiene límites muy finos, si tenéis más ideas ya sabéis...

Y recordad algo básico, las luces de emergencia dan derecho a todo, usadlas tanto como podáis.

*Modelo Zamora, en las modelo Big City aún no he conducido, por suerte.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo añadiría la obligación de que, en cuanto el semáforo cambie del rojo al verde, el segundo y tercer coches de la fila tendrán que hacer sonar su claxon. Supongo que esto es para que el conductor del primer coche no tenga problemas de tortícolis mirando el semáforo, ya que está demasiado encima de la línea.

Lete F. dijo...

Hay un truco para esa situación. Te esperas a que vuelva a ponerse ámbar y entonces pasas, a esos que pitan se les pondrá en rojo y tendrán que esperar un rato más. Yo nunca lo he hecho claro, es que me lo han contado...

Anónimo dijo...

Lamentablemente, es la puta verdad.
Podrías añadir la obligación de realizar adelantamiento si el vehículo de delante circula a la velocidad marcada en la señal circular roja, máxime si hay línea continua.